El recuerdo y el olvido van más de la mano de lo que a priori se pueda pensar. Queremos recordar en muchos momentos y no olvidar, y en otras ocasiones olvidar y no volver a recordar. La mente es esa batalla que se lidia día a día con la vida, y con la sociedad que a veces nos manda más de lo que podemos abarcar.
Marcos Ana (Fernando Macarro Castillo) ha sido el preso político que más tiempo consecutivo pasó en la cárcel durante la dictadura franquista. 23 años de su juventud y la mitad de su vida. ahora su hijo y su madre, Vida Sender Begué, mujer de Marcaros Ana, leerán documentos y verán videos sobre el poeta que ayudarán a recorrer una vida y una época de la historia de España.
Marcos Macarro Sender realiza un homenaje a su padre Marcos Ana (Fernando Macarro Castillo) por medio de la mirada de su madre, de sus recuerdos, de las grabaciones que poseen, y de todo lo que le inculcó en su infancia. Al mismo tiempo es un recorrido por una época y no solo será el recuerdo de la figura del padre, si no de todos aquellos que han estado retenidos por unas ideas.
En esa enfermedad de Vida, está la visión de la verdad de su época más feliz, de esa que recuerda retazos y que cual puzle intenta recomponer por medio del amor y del dolor del recuerdo de vivencias en algunos momentos nada halagüeñas.
Un trabajo sincero, emotivo y de calado humano, buscando la positividad de la negrura de una época. Los recuerdos de lo aprendido y vivido, y también perdonado.
Marcos Ana, se hizo asímismo durante 23 años de encarcelamiento, entró muy joven, y para sobrevivir en esas cuatro paredes surgió el desahogarse escribiendo, con la palabra como herramienta de terapia y supervivencia. Aquí en esta película documental las reflexiones de madre e hijo viajan al pasado para poder dar un poco de luz al presente, en esa oscuridad que reina en Vida.
Me gustaría saber en qué año dejó Ocaña Marcos Ana.