El ojo de tu costado se forjó hace dos años, pero la pandemia, como para muchos artistas, hizo que se tuviera que posponer. La idea en primer instante fue concebida para un disco acústico, más con guitarra, piano y contrabajo, pero al final el tiempo de espera le dio para que cada canción tuviera más arreglos musicales: Nos ha dado tiempo a hacer barbaridades y pensábamos que era un disco que nunca acababa, por cada cambio y por los parones, el tiempo ha hecho que el disco fuera mucho más cañero.
Este disco, El ojo de tu costado, es su tercer trabajo en su solitario. Su primer disco “Vuelvo a Entrar” con la colaboración por ejemplo de Jaime Urrutia y posteriormente en 2016 lanza al mercado “Tiempo al Tiempo”
Para su tercer álbum ha contado con Candy Caramelo (Productor) y José Bruno a la batería (Leiva, Calamaro, Fito Cabrales) y con las grandes colaboraciones como las de Ovidi Tormo (Los Zigarros) y Miguel A. Escrivá (Santero y los Muchachos).
Si escuchamos El ojo de tu costado, notamos que la guitarra cobra una gran relevancia, como dice Sotos, hay una instrumentación a lo bestia, pero al mismo tiempo la sonoridad de las letras y su fondo está muy bien incrustado, pasando por muchísimos estilos musicales, donde partiendo del rock nos encontramos con blues, soul, con arreglos electrónicos e incluso swing como en la canción homónima del disco. Una composición que nos invita a bailar, a dejarnos llevar por la letra vestida por una gran melodía.
Este es un proyecto en solitario y cuesta mucho defenderlo después de la grabación. Quiero llevar mi banda, pero con las bases correspondientes. Por ejemplo, la canción que cierra el disco, Tot he beat, es donde más bases hay.
Sotos se encuentra muy satisfecho con el trabajo conseguido, con una acústica donde ha podido realizar un trabajo más amplio de lo ideado y que les ha dado un trabajo mucho más coral y global. Ahora el directo será otro mundo, quiere defenderlo tal y como está grabado, pero es consciente que los conciertos y los bolos están como están e irá ayudado en muchos momentos por las nuevas tecnologías, las bases, para, aunque vayan en formato reducido el sonido no varíe demasiado.
Fotos: Alejandro Sánchez – 7 y Media
Su disco es variado, algo que le gusta mucho a Sotos; le gusta componer de manera diversa y reniega de lo que la industria quiere como sello de identidad. No quiere encasillarse en un estilo, y es algo que le ha caracterizado desde la primera banda en la que estuvo en los 90. No le importa tocar cualquier estilo mientras que su voz marque su personalidad.
Dentro del disco, está la adaptación de Puerta de Amor de Nino Bravo. Él tenía pensado incluir una canción de toda la vida, llevada a su estilo, pero la elección tiene su historia: Volviendo de la grabación de la primera canción de unos amigos paré a comer a casa de unos amigos, y esa casa era del mánager de Nino Bravo, vi unas estatuas conocidas, y allí había estado el cantante haciéndose fotos para uno de sus discos. Ahí es cuando decidí que elegiría una canción de él, pero no una conocida, y Puerta de Amor siempre me había gustado, a sabiendas que no era una composición suya.
Es vedad que Sotos la ha llevado a su terreno, a su voz, a su musicalidad de rock, pero partía con una de las canciones más potentes musicalmente hablando, de Nino Bravo, en su voz los toques de rock ya estaban incrustados, la potencia impuesta ha dado que sea la conjugación perfecta para que sea personal desde la voz de Sotos, pero manteniendo el espíritu original: Fue complicado adaptarlo con tanta instrumentación, no sabíamos el camino por donde llevarlo, pero Candy, quien ha realizado los arreglos respetando la melodía y reconozco que pensando que me iba a ser complicado, pero me salió sola. Luego tenemos la versión con Miguel Ángel Escrivá era algo que teníamos pendiente, y al ser él, Nino Bravo y yo valencianos pensamos que era algo especial, y la combinación de ambas voces tenía química y creo que ha sido una buena decisión.
Su canción “Domingos Raros” de su segundo álbum “Tiempo al Tiempo está dentro de la banda sonora de la película “Todos lo saben”, dirigida por Asghar Farhadi y protagonizada por Penélope Cruz, Javier Bardém y Ricardo Darín. Algo que le pilló de improviso, fue una petición expresa de ese título, para él significa satisfacción, un reconocimiento a su trabajo, a su autoría. Puede que no sea su última participación en el séptimo arte, pero de momento no puede contar nada al respecto.
De momento no hay gira como tal, va a comenzar con algún acústico, y en septiembre comenzará a preparar más conciertos con banda por el territorio nacional. Admite que ahora es todo muy complicado porque todo está ocupado debido a todo lo que se tuvo que cancelar en su día. Aún así, Sotos, es optimista, de hecho la semana pasada hizo una pequeña presentación del disco en su tierra, que sale al mercado esta semana.