Leilah Broukhim da el salto a la publicación de un disco, el Ep The Curve, producido por Fernando Vacas. Un disco lleno de matices musicales, de géneros que van desde el soul, el country o el rock. La cantautora nos habla del comienzo en su carrera musical, y del resto de su faceta artística
Una gran trayectoria en el baile, ¿cómo decides grabar este primer EP?
Si, es verdad, el Flamenco es una gran parte de mi esencia. La música entró en mi vida como un regalo inesperado y me ha permitido desarrollar otra faceta de mi creatividad que ni siquiera sabía que existía hasta que cogí una guitarra. En 2019 decidí grabar 4 canciones con mi amigo Fernando Vacas en su estudio en Córdoba y la experiencia fue mágica. Cuando llevaba un año tocando con banda, era tanto el disfrute de tocar con ellos que tenía claro que quería grabar un proyecto más completo juntos y que lo produjera Fernando, que sabe captar el sonido que tengo en mi cabeza y llevarlo a otro nivel. El resultado es ‘The Curve’ y no podría estar más ilusionada.
Muchos sonidos en tu trabajo, ¿eres de buscar etiquetas y estilos, o te dejas llevar?
Cuando me sale una canción no pienso en un estilo, solo escribo. Al “desnudo”, cuando estoy sola con mi guitarra, mis temas suenan muy Folk. Pero a raíz de trabajar con los musicazos de mi banda (Nico Martín, Jesús Caparrós y Shayan Fathi) que tienen una gran influencia jazzística, cada canción ha cogido una forma diferente con arreglos que encajaban con el feeling de cada una. Lo que sí une los 5 temas del EP y mi música en general es una vibra psicodélica setentera (¡me encantan los 70’s!) y el corazón (peace and love, baby).
¿Cuánto tiempo te ha llevado crear este nuevo trabajo The Curve?
El EP contiene una mezcla de temas antiguos y nuevos. “Roam the Heavens” por ejemplo es el primer tema que compuse en el 2015. La canción “The Curve” la escribí el año pasado. Pero el proceso de creación del disco ha sido bastante rápido. Grabamos los temas en febrero y el primer single salió en septiembre. Ha sido intenso, pero todo un aprendizaje y cada paso una bendición.
The Curve evoca a América en sonidos y video, ¿era tu intención?
Creo que es un poco inevitable que mi música evoque a los USA porque nací y me crié en Nueva York y mis primeras influencias musicales fueron el pop de la MTV, el jazz que ponían mis padres en casa y el hip-hop que bailábamos en las fiestas del insti. Luego, al llegar a España pasé casi 20 años solo pensando en el Flamenco. Inconscientemente supongo que con ‘The Curve’ estoy volviendo a mis raíces musicales americanas e incluso música que empezó a fascinarme más tarde en mi vida, como el Folk, el Country o el Rock clásico.
¿Qué trabas has tenido para realizar este trabajo?
Realmente, ninguna, ¡por suerte! Creo que cuando tienes a músicos que te acompañan, que creen en el proyecto, a un productor que entiende tu concepto y quién eres y cuando te adentras en el trabajo con certidumbre y sin miedos, todo es posible. Eso no quiere decir que no tuve/tengo momentos de incertidumbre y de miedos, como todo el mundo supongo, pero me sentí apoyada en cada paso y tenía claro lo que quería transmitir y eso ayuda mucho.
¿Cómo es tu forma de componer?
Cuando me pongo a componer es porque siento que hay algo dentro de mí, un sentimiento o una idea que necesito expresar. Cuando mi mente está llena de pensamientos y de repente aparecen unas palabras, una melodía, o las dos cosas, cojo la guitarra y empiezo a buscar los acordes. Lo que impulsa la canción hacia delante es la historia que quiero contar. A veces sale un verso o un estribillo, a veces unas líneas, a veces nada, pero si logro canalizar mi intención y conectar con un lugar más profundo, con lo que siente mi alma, la historia se transforma en letras y música y en esos momentos parece que se para el tiempo.
Desde dónde se compone mejor, alegría, tristeza…
No sé si se compone mejor o peor desde un sentimiento u otro. ¿Qué es lo que hace que una canción sea “buena” ?, es una gran pregunta y creo que depende de muchos factores. Una vez escuché a Björk decir que lo único que importa es que a ELLA le guste su música, no de una forma egoísta, sino que ella es su mayor crítica, lo demás no importa, y esto se me quedó. Pero para contestar la pregunta, a mi componer me ha ayudado a sanar momentos difíciles y atravesar sentimientos de tristeza, rabia o soledad, ¡pero también recuerdo escribir canciones desde un punto de euforia pura y sentir que estaba volando! En definitiva, me asombra el proceso de inspiración/creación musical.
No sé si para alguno de los videoclips has hecho tú el guion
¡Los videoclips no tienen guion! Pero sí que he desarrollado conceptos muy claros y cuidados para cada uno.
Dos videoclips muy diferentes, uno de animación y otro más clásico homenajeando a los musicales y videos de baile, ¿cómo nace cada uno?
La idea para el videoclip de ‘The Curve’ nació una noche en casa de una amiga escuchando música y le pregunté, “¿Conoces al grupo Jungle? ¡Tienen unos videoclips super chulos de baile!”. Puse uno y de repente se encendió una bombilla en mi mente, salté del sofá y declaré, “¡Voy a hacer un videoclip de baile!” Y desde allí la rueda de ideas no paró hasta que grabamos. Antes de bailar flamenco estudiaba ballet, claqué y jazz en una escuela de baile en Nueva York. Fue cumplir un sueño de mi infancia crear este proyecto y el coreógrafo Juan Vicente Riera pilló enseguida el rollo que quería. Para el videoclip de “Break Your Spell” quería hacer algo más divertido, más juguetón. Había visto el trabajo de BPMT Studios, que tiene un estilo de animación muy psicodélico y me encantó. Le dije que quería un feeling California, desierto, naturaleza, flow, libertad y lo ha logrado, las imágenes acompañan a la música como un guante.
No sé si con cada canción harás un videoclip y cómo ves la importancia de ello para un trabajo musical.
Personalmente me gusta escuchar música solo con el audio, por lo menos para la primera escucha, así puedo crear mi propia visión de lo que el artista está contando. Me encantaría que fuese así también cuando la gente escuche mi música, pero hoy en día lo visual es más accesible y necesario para hacer llegar la música al público. Con un videoclip hay menos lugar para la imaginación a la hora de escuchar la música, sin embargo es una herramienta creativa que me encanta como artista. Estudié cine en la universidad en Nueva York y me inspira poder aplicar mi aprendizaje cinematográfico a la música. Para el EP, hay un video más que es “Roam the Heavens” grabado en directo. “Muse” y “The Opponent” (que por cierto, son mis temas preferidos del disco) no tienen videoclip, así que habrá que escucharlos directamente.
¿En qué estado de salud ves el sector cultural en estos momentos?
Hoy en día siento que la cultura en España está en peligro, no es una prioridad y por lo tanto muchos artistas están luchando más que nunca. Sacar un proyecto adelante como artista independiente requiere mucha fuerza de voluntad, valor y suerte. Como el sector está cada vez más dominado por las redes, el punto de enfoque está puesto más sobre el producto y menos sobre la música en sí. Hay muchos artistas que tienen muchas cosas que contar, pero no tienen donde/como contarlos. Me siento afortunada porque cuando empecé a tocar, encontré una comunidad de cantautores en Madrid en el micro abierto del Búho Real donde la gente escuchaba y se apoyaba de verdad y esto me dio la confianza de seguir para delante.
Has trabajado en muchos países, ¿Qué te han aportado cada uno para este disco?
Más que los países donde he estado, son las personas que se han cruzado en mi camino y las experiencias que he tenido en estos viajes que me han marcado e influenciado.
Influencias musicales
Mis tres “J’s: Janis Joplin, Janis Ian, Joan Armatrading. Fleetwood Mac, Nina Simone, Patti Griffin, Donny Hathaway, Elliott Smith y Broadway.
¿Nuevos proyectos en el baile?
En 2019 creé un espectáculo que se llama “Lorca Poeta Flamenco” en homenaje al flamenco que amó Lorca. Adoro este espectáculo, mis compañeros de escena y bailarlo. Estuvimos dos años actuando en Madrid y ahora tengo ganas de presentarlo en otros lugares y festivales.
Un sueño por cumplir
Ser madre.