«Animación y Compromiso» es el nuevo ciclo de cine que la Fundación Sgae programa en la Sala Berlanga. Cuatro películas de animación para adultos, que gira en torno a la obra de Fermin Muguruza -dos películas-, que se acompaña de otros dos títulos que van muy acordes a su propia temática.
Bien podría haber estado Fermin Muguruza en el ciclo anterior donde hicieron un recorrido por muchas de las películas nominadas a los Goya, pero La Fundación Sgae se guardó en la recámara el título (Black is Beltza II: Ainhoa) finalista a los Premios Goya 2023, junto con la primera parte, Black is Beltza, y otros dos títulos de animación: Un día más con vida, en la que Damián Nenow y Raúl de la Fuente retratan el conflicto de Angola y Buñuel en el laberinto de las tortugas de Salvador Simó, sobre un cómic de Fermín Solís que narra la filmación del documental Las Hurdes, tierra sin pan realizado por Luis Buñuel durante la II República, para crear este ciclo de animación para adultos.
Me pareció una idea genial este ciclo, además mis películas se turnan varios días, pero que se puedan ver las dos seguidas el día 18, que es como vi yo Kill Bill 1 y Kill Bill 2, con un pequeño descanso, es un privilegio. La primera se puede ver en Netflix, pero poder verse en una sala con la calidad de sonido e imagen es una maravilla. Estar acompañado por estas dos películas adicionales le da mucha entidad a lo que quería plasmar el ciclo.
Fermin Muguruza
El director nos cuenta que con la primera parte, Black is Beltza, coincidió con Salvador Simó en promoción tanto aquí como fuera, teniendo puntos en común en las historias, además e incluso, lo tiene con Un día más con vida. Admite que el cine de animación y estas cuatro que están en el ciclo, son ese cine para adultos ligado al compromiso social de narrar historias con fondos, y que el detonante para grabar estas dos cintas fue Vals con Bashir: habla precisamente de la guerra, de lo que fue antes de la masacre de Sabra y Chatila en el Líbano, que también tiene que ver con nuestra película, ya que aparece lo que sería la consecuencia de ello algunos años después de la masacre.
La segunda película de Fermin Muguruza arrancó su andadura en el Festival de San Sebastián del 2022 y hasta el día de hoy no ha parado de recorrer festivales y países donde se ha estrenado, y tal y como nos cuenta su director: va a ser un no parar hasta el mes de junio. La pregunta obligada después de este gran recorrido es saber si vamos a poder ver una tercera parte, y nos dice que sí, que le gustaría e incluso sería un sueño, pero con tiempo, incluído el del descanso después de esta promoción tan larga como atrayente, ya que ha recorrido y recorrerá tanto festivales de cine como de cómics.
Fermin Muguruza ha tenido casi el mismo equipo en ambas películas, solo que en la segunda parte entró a formar parte del equipo de guionistas Isa Campo en lugar de Eduard Sola. Con ella quería tener una mirada más desde la perspectiva femenina ya que la protagonista era una mujer, y con Eduard, en la primera, una visión más de guerra donde él tenía más conocimiento.
Esta entrevista se realizó el 8 de marzo y el director quiso recalcar el gran trabajo no sólo de Isa, sino de todas las mujeres, que han sido muchas las que han participado en este trabajo, como pueden ser Maite Arrotajauregi, Mariona Omedes, o Susana Martín. Hemos tenido dos mujeres más con nosotros, que están dentro del movimiento LGTBI ,que son Natalia de Ancos y Kattalin Miner, que después de tener escrito el guion hicieron un análisis muy interesante para realizar la última escritura del mismo.
La música es otro protagonista más, y como nos asegura Fermin, es algo que va en ambas cintas, pero que en la segunda incluso han traducido las letras de las canciones: Hemos subtitulado todo para que la gente sepa lo que se está diciendo, ya que va muy bien lo que cuentan y nos sirve para tejer una secuencia con la siguiente. De hecho, siempre digo que construí la película como si fuera una partitura, por el ritmo, por el cambio de secuencias y por la diversidad de lenguas que se mezclan en casi una película musical que puede llegar a ser Black is Beltza II: Ainhoa.
No se pudo llevar el Premio Goya a mejor película de animación, pero para él como si lo hubiera hecho al haber ganado Unicorn Wars con quien también ha compartido trayectoria de promoción en tiempo y espacios, y ver cómo es un género que cada vez tiene más cabida y auge en creación.