El pasado día 3 de septiembre comenzó el festival «Insólito & Singular», y tras entrevistar a Diego Galaz, queríamos conocer un poco más del evento, de las razones de rescatar la esencia del festival de Burgos y que Germán Hughes, director del Café La Palma, nos hablase también de la sala. Insólito & Singular tendrá lugar todos los domingos de septiembre y octubre en el Café La Palma.
La cifra de 25 años está en vuestro recorrido de sala ¿Cómo se llega a ello y qué dificultades habéis tenido en el camino?
Así es, 28 años en activo y siempre con la misma dirección ejecutiva, implican mucho esfuerzo, noches sin dormir, y más de doce mil conciertos y actividades culturales de todo tipo.
¿Que como se llega? Como diría el Cholo, partido a partido, y en nuestro caso, concierto a concierto, y poniendo mucho mimo en cada uno de ellos…
Dificultades han sido muchas, desde la reciente pandemia o las crisis financieras a los cambios normativos como los de la ley del tabaco, pero sin duda la mayor dificultad siempre ha sido la relativa a permisos, licencias, y la indiferencia (en el mejor de los casos) con la que durante mucho tiempo nos ha tratado la administración… aunque afortunadamente en los últimos años las cosas han cambiado un poquito, y las distintas administraciones empiezan a mirar con otro prisma la actividad cultural que desarrollan las salas de conciertos.
Sois una de las salas más activas de Madrid, ¿Cómo se logra una programación constante?
Con mucho trabajo. Pero no solo eso, también es necesario un equipo comprometido al que le gusta, hace y que cree en ello, y que tenga una capacidad casi infantil de seguir sorprendiéndose y disfrutando con la música sin perder el sentido crítico, a la vez que manteniendo una mirada no solo de fan, sino empresarial, para ser capaces de conciliar propuestas interesantes y sostenibles.
Además, para tan ardua tarea contamos con partners y promotores eventuales, que nos ayudan aportando sus propios contenidos y mirada particular…
En estos momentos estáis con el ciclo «Insólito & Singular» ¿Cómo nace la idea de recuperar el evento tras un tiempo de parón?
Bueno, aunque en estos últimos meses, y al hilo del libro Macrofestivales de Nando Cruz, se ha puesto en boga una mirada más crítica hacia los eventos masivos, desde nuestro pequeño escenario nosotros llevamos tiempo reivindicando que los espacios pequeños facilitan una interacción con las bandas que no se consigue en los grandes escenarios, y que la experiencia será, a lo mejor menos festiva o descontrolada, pero desde luego mucho más intensa…
Desde esa premisa, pensamos en la cantidad de propuestas buenísimas y más que sólidas que nunca tendrían la chance de ocupar ya no las cabeceras de los festivales, sino tan solo de integrar sus line-up… y recordamos que hacía años Diego Galaz, al que conocíamos por su labor en Fetén Fetén, ya había impulsado una iniciativa en dicha línea, y si bien sería lícito lanzar nuestro propio ciclo con premisas similares, nos parecía más honesto reconocer la labor previa que Diego, y también contar con él y su experiencia, para tejer un nuevo ciclo, que aunque tiene mucho en común con el de Burgos, cuenta con su propia idiosincrasia y objetivos.
Por ejemplo, Insólito & Singular hace referencia tanto a los instrumentos y repertorios insólitos como a los lugares singulares a los que aspiramos a llevar el festival, pues nos gustaría transformarlo en un evento itinerante, que recorra la península y dé la opción de escuchar estas propuestas en lugares tan dispares como podrían ser el Templo de Debod, el Torreón del Conde Duque, el Teatro Romano de Mérida, o la Casa Batló en Barcelona…
La pandemia hizo estragos en la música, y en por ende en las salas. El festival recuperado se esfumó, ¿cómo os ha influido estos años de Covid a vosotros, Café La Palma?
Bueno, que duda cabe que la pandemia hizo mella a muchos niveles.
Para empezar, que tras años de lucha y un larguísimo proceso administrativo, en noviembre de 2019 conseguimos sacar adelante nuestra licencia de café-espectáculo (que extiende nuestro horario hasta las 06 hs) y tan solo 4 meses más tarde, cuando habíamos ampliado plantilla y adquirido compromisos para hacer una temporada de impacto, llegó la pandemia y se llevó todos nuestros planes por delante, dejándonos con ciertos compromisos económicos que significaron más de un dolor de cabeza…
Después, cuando por fin pudimos abrir, toda la gestión sanitaria fue una auténtica labor añadida en la que debíamos hacer que la gente respetase la normativa, creyese en ella o no, y fuera en la condición que fuera…
Por último, lo más difícil fue hacer sostenibles los conciertos con solo 40 personas sentadas y respetando las distancias. Solo fue posible gracias al compromiso e implicación de, primero, nuestro personal de sala, que modificó sus horarios y hábitos de trabajo, para hacer hasta cuatro pases diarios y así sumar 120 asistentes totales, que son números que permiten al menos equilibrar los ingresos y gastos, y de grupos y promotores después, que mayoritariamente respondieron positivamente, adaptándose a los tiempos y posibilidades de la nueva realidad…
Habéis mantenido a Diego Galaz, director artístico ¿Era algo importante para vosotros para mantener la esencia del festival?
Sí, claro, como decía antes, nos parecía tanto lo más honesto, como también lo más lógico, porque sin duda su experiencia, así como su conocimiento, no sólo como promotor de la edición de Burgos, sino como músico de Fetén, son de un valor incalculable.
Me decía Diego Galaz en la entrevista: “Lo que es insólito es subjetivo. Normalmente, es aquello que nos va a producir sorpresa”. ¿De su elección en el cartel, que concierto es más dispar a lo que normalmente tenéis o te ha sorprendido a ti?
Ja, ja, ja. ¿Cuál de los personajes de Freaks Parade era más freak? Todos son únicos y sorprendentes, y sobre todo si lees los riders técnicos de cada grupo!! ¡Por ejemplo, el pasado domingo entre los instrumentos a sonorizar había un tronco de árbol de 1,5 mts de alto y unos 70 ctms de ancho!
La Orquesta Reusónica, que construye todos sus artilugios sonoros a partir de elementos recogidos del vertedero municipal; Vibrató, que hacen música hasta con unos simples CD’s transmutados de soporte digital a emisor sonoro; o el francés Pierre Bastien, que dirige una banda de autómatas, son sin duda los que más me han dado vuelta la cabeza.
Sin duda la música es el hilo conductor, pero de esta Palma salen muchas patas (o dedos…)
Puede que sea un concepto de música distinta a lo que ofrecéis habitualmente, ¿una forma de quitar las etiquetas musicales que tanto usamos?
No nos gustan mucho las etiquetas, es verdad. De hecho, pensamos que hay una música para cada momento del día. A las 10 de la mañana, según te acabas de despertar, seguro que encaja más la voz rota de ZAZ o la cadencia del Niño de Elche, que el ritmo trepidante de Trippin’ you, y, sin embargo, por la noche, a lo mejor te encaja más la energía de los Carolina Durante o el ritmo electrónico de los Ganglios…
Nos gusta pensar que en La Palma caben todas las músicas, y por eso en nuestro escenario ha habido artistas del indie, Vetusta Morla, Izal, o Love of Lesbian; de la canción de autor, como Joaquín Sabina, Mercedes Sosa o Pablo Milanés; del hip hop y el trap, como Chojin, DefconDos luna Ki o Scarface Johansen, y de la electrónica, como Ángel Molina, Kenny Larkin, Addicte TV, HD Substance, y un largo etc.
¡De ponernos etiquetas, tendríamos que ponérnoslas todas!
¿Qué tal está siendo la acogida?
¡Muy buena!. Es increíble la avidez con la que gente se acerca a estas propuestas. Es gente con inquietudes que se salen de la norma, y la entrega y la actitud es la de poner en valor la experiencia sonora, y zambullirse en ella sin prejuicios de ningún tipo.
Vuestra sala, además de conciertos, también ofrece otras actividades, una forma de tener más alternativas al público, ¿no sé desde cuándo están y cómo se introducen en el cartel en vuestra sala?
Desde siempre hemos procurado que La Palma sea un lugar en el que ocurren cosas. No solo la música es parte de la cultura underground. Por eso, mensualmente contamos con dos exposiciones de artes plásticas, donde entran desde la pintura o el diseño digital a los collages y la fotografía o las instalaciones interactivas, y además salpicamos nuestra programación con Show de Impro, Comedia, Teatro y Cabaret, Cuentacuentos, Recitales de Poesía, y hasta cine mudo al que ponemos la banda sonora en directo con bandas como los asturianos Casperveck…
Sin duda la música es el hilo conductor, pero de esta Palma salen muchas patas (o dedos…)
Un sueño por cumplir
Darle, a través de Insólito y Singular, a todos esos geniales artistas que no cuentan con el beneplácito de las masas y los medios, una lanzadera desde la que romper barreras y prejuicios, para dejar de ser considerados artistas de nicho, y pasen a integrar los line-ups de festivales convencionales sin ningún tipo de diferenciación.
Es música, y con eso es más que suficiente…