Siempre es de agradecer que alguien te ofrezca cine que no te deje indiferente en esta época que tenemos donde abunda el cine más de consumo, y que hay que bucear, cinematográficamente hablando, para encontrar pequeños regalos del séptimo arte.
Todavía recuerdo la primera película de Arturo Prins que visioné: Autopsia de un amor. Una visión poética, y personal, del amor y del desamor, pero siempre con otra temática de fondo. El director y pintor argentino nunca busca una mirada tibia ante la temática a tratar, siempre está buscando los recovecos más personales y universales para que su película trascienda por su forma y fondo.
Pero no solo ahí se queda su profundidad a la hora de vernos inmersos en un mundo de poesía y de reflexión, sino que también tenemos pensamientos, aforismos y sutras de Friedrich Wilhelm Nietzsche, Ovidio, Buddha, Jean-Luc Godard y Miguel Ángel González García, todo un placer para el oído, los textos escogidos, todos tan bien hilados con la temática expuesta.
Extracto de la reseña publicada en Cineralia donde ya aparecía Godard.

Un director que aunque no ha llegado a las salas con muchos de sus trabajos, es digno de visionar por su forma narrativa tan sencilla como compleja. Y ahora nos presenta el tráiler de su próximo trabajo, un mediometraje, No tengo nada que decir.
No tengo nada que decir (Je n´ai rien a dire) es «un homenaje a la vida y obra de Godard, uno de los cineastas más influyentes del siglo XX. A través de este encuentro, exploramos no solo la creatividad y visión de este maestro del cine, sino también su impacto en el pensamiento crítico hacia la cultura de la imagen».
Arturo Prins
La película, una reflexión sobre la obra del autor de Al final de la escapada, se estrena en cines el 12 de enero de 2024, y como se puede ver en el tráiler nos podremos encontrar, seguramente, un puzzle donde el director francés, Godard, quede retratado desde la retina de Arturo Prins.

Si hablamos de los últimos trabajos de Arturo Prins debemos destacar Estado impuro, Under The Banyan Tree, aunque, además, recomiendo pasar a visitar su página.
El director Arturo Prins partía en Autopsia de un amor de una narración personal, íntima e incluso poética por momentos, aquí la realidad llena la pantalla. Él dice que las películas como ésta comienzan a abrir un camino sobre la necesidad de revisar los modelos emocionales de relación. En eso difiero un poco, soy de la opinión que si ésto se está contando es porque está ahí, presente. La realidad está casi siempre por encima de la ficción, pudiéndose adornar un poco, pero con una base clara.
Extracto de la reseña publicada en la web el 29 de octubre de 2020
Se nota a la perfección que Under The Banyan tree fue rodada después de Autopsia de un amor. Este documental lleva el tono poético tanto en narración como en imagen que tenía su predecesora, nada en común en temática, pero sí en parte de la forma. Es algo destacable y de aplaudir que Arturo Prins haya dejado una seña propia de identidad a un trabajo de encargo, haciendo algo propio en lo que plasma en el documental.
Extracto de la reseña publicada en la web el 29 de octubre de 2021

Destacar uno de sus cortometrajes, Mechongué, que terminó en 2021:
Mechongué es una historia con pinceladas de cuento casi apocalíptico, de magia, de intriga, posee el poso de la empatía en esa relación, de un auxilio, más de almas que físico, que puede decantarse o inclinarse a algo más, pero eso ya es otra interpretación que cada uno deberá hacer, ya que los minutos finales pueden hacer variar la historia o simplemente pensar que la imaginación juega malas pasadas. Las secuencias que hay entre los dos personajes se basan en las miradas, en la contención y en la propia interpretación del espectador, de ahí saldrían miles de historias, como miles de personas.
Extracto de la reseña publicada en la web el 1 de octubre de 2021


SINOPSIS
Un pintor en busca del legendario Jean-Luc Godard viaja a Rolle, Suiza, donde él vive, para obsequiarle una obra de arte. Su encuentro fue el mismo día y mes en que JLG decidió morir, pero dos años antes. Sin embargo, el destino le tenía preparada una sorpresa: Godard renace como un niño en Buenos Aires. Ahora, el pintor emprende un viaje sobre el pensamiento del cineasta, recordando su último Film Socialista, y la carta que le dedicó al director del Festival de Cannes, Thierry Frémaux, mientras intenta reunirse una última vez con el genio renacido en aquella ciudad. Esta extraña carta al espíritu de Godard, es una estimulante y revulsiva despedida que celebra la vida y obra de un maestro del séptimo arte.