Dos semanas para el Festival Internacional JAZZMADRID 2023. Una edición cargada de colaboraciones con otros festivales y salas de la capital, y que ha reunido a numerosos artistas tanto de jazz internacional como del nacional, pero con una variación de estilos que hacen que esta edición esté a la vanguardia de los sonidos que rodean al género musical del jazz.
El próximo jueves 23 de noviembre, en el Teatro Fernán Gómez, será el turno para Elliott Sharp Fourth Blood Moon, encabezado por Elliott Sharp y que además de dar título al disco que sacaron años atrás, también es el nombre de la formación. El propio artista, camaleónico musicalmente, nos habla de su música, de su trayectoria y de su visita al festival.
¿De dónde viene la pasión de Elliott Sharp por la música?
He sentido la música profundamente desde que era pequeño. Escuchar la Consagración de la Primavera de Stravinsky en Fantasía, la película de dibujos animados de Disney, fue un momento fundamental: ¡música poderosa + dinosaurios! Siempre me ha gustado la música oscura y rápida. Mi primera actuación fue interpretando al piano la Rapsodia Húngara nº 2 de Liszt en el Carnegie Recital Hall a los 7 años.
¿Qué le ha aportado a tu carrera profesional ser multiinstrumentista?
Una gran satisfacción para mí. Mi interpretación instrumental es desde la posición de compositor y orquestador, no tanto como un esfuerzo técnico. También confunde a algunos que tienen problemas para clasificar mi trabajo.
¿Qué significa para ti la música?
La música es un cambio químico psicoacústico tanto para el que la hace como para los que la escuchan.
¿Puede presentarnos a los otros miembros de la banda que actuarán en el Festival Internacional de Jazz de Madrid?
El cantante es Eric Mingus (también poeta, bajista, guitarrista, pero aquí sólo canta). Canta sus propias letras y también algunas escritas por mí. El bajista es John Edwards, del Reino Unido. Es un bajista visionario, un reconocido improvisador y un virtuoso de muchos estilos. Lo mismo puede decirse del batería estadounidense Jim Black.
¿Qué significa para ti estar en el festival?
En mis varias décadas de carrera, es la primera vez que actúo en Madrid, así que es muy emocionante.
¿Con qué nos sorprenderá Elliott Sharp Fourth Blood Moon en el festival?
Sorprenderemos al público sorprendiéndonos a nosotros mismos. Aunque toquemos canciones, hay un fuerte elemento de improvisación, por lo que nuestra realización de estas piezas es diferente en cada actuación.
Fourth Blood Moon es un disco que tenéis desde hace años, pero seguís tocando, ¿cuál es la razón para continuar con él?
Estamos tocando algunas piezas del disco Fourth Blood Moon, que también es el nombre de este grupo. La mayor parte de nuestra actuación en Madrid será del último álbum a dúo de Eric Mingus y yo, titulado Songs From A Rogue State.
Es un trabajo poco convencional, ¿cómo se creó y cómo ha crecido con el tiempo sobre el escenario?
La considero «música pop», ya que bebe tanto del rock, el blues, el funk, el techno y la música electrónica de baile como de la experimentación sónica. Aunque cada canción tiene una identidad clara, permitimos variaciones en la interpretación.
¿Es diferente para vosotros tocar en un concierto individual que en un festival?
Cada concierto es una colaboración socioacústica con la acústica de la sala, con la escucha y las emociones del público. Siempre es una negociación dinámica.
Muchos estilos musicales en tu carrera, ¿te gusta variar?
Aunque reconozco la diferencia de estilos, los veo como una continuidad y no como separaciones. He vivido y tocado muchas formas de música en mis 72 años y todas se compenetran.
¿Está a favor o en contra de las etiquetas musicales, jazz, blues, electrónica, clásica…? ¿En qué benefician y en qué perjudican?
Estas etiquetas tienen cierta utilidad, pero por desgracia las codiciosas corporaciones musicales han intentado que toda la música se ajuste a unos parámetros estilísticos. Yo llegué a la mayoría de edad en los años 60, cuando la radio de los 40 Principales tenía una variedad increíble, incluida música experimental y emocionante. Ahora, el género manda en la producción y distribución de la música.
Muchos años en la música, ¿cuál es su balance de todo este tiempo en la música?
Es un proceso continuo de equilibrio entre composición, giras y actuaciones, trabajo de producción y familia. También soy autor y artista visual, así que también hay que compaginarlo. Nunca hay suficientes horas al día.
¿Cómo ha cambiado el sector musical en todos estos años?
La música sigue creciendo, pero, por desgracia, las codiciosas empresas intentan continuamente quitar dinero a los artistas creativos para engrosar sus propias arcas. Si amamos la música nos mantenemos, pero quién sabe por cuánto tiempo…
¿Cómo te preparas para un concierto?
Un expreso doble.
¿Cómo compones?
Escucho… y escucho. Una vez que escucho la música (y ésto a veces puede llevar meses), su forma y sus materiales, empiezo a escribir en notación o a desarrollar sonidos, grabarlos y manipularlos. Pienso en la composición musical como una traslación de la semilla de la inspiración creativa a la banda de frecuencia adecuada de su salida, en este caso, el sonido. La inspiración también puede llevarnos a escribir, pintar, cocinar o incluso pasear.
¿Qué quieres transmitir con tus composiciones?
De nuevo, un cambio químico psicoacústico. Si pudiera expresarlo con palabras, no necesitaría crear la música.
¿Influencias?
Demasiadas: desde los sonidos del clima y la naturaleza, hasta Jimi Hendrix, el country blues de Robert Johnson y Skip James, la música ritual tibetana, los pigmeos congoleños, la música clásica india, Edgar Varese y Iannis Xenakis, Beethoven, el Tao Te Ching y otros escritos filosóficos, la literatura…
¿Un sueño por cumplir?
Ningún sueño, solo acciones emprendidas para preparar los numerosos proyectos que me gustaría emprender. Quizá el mayor sea mi ópera Sustancia, basada en la vida y filosofía de Baruch Spinoza, quizá el primer filósofo «moderno». Llevo varios años trabajando en ella, a veces en primer plano de mis actividades, a veces en un segundo plano. En este momento necesito un encargo para tener tiempo de desarrollar el libreto y componer la música.